La Patología General constituye un pilar esencial en la formación del médico veterinario, ya que brinda las bases para comprender los mecanismos fundamentales del proceso salud-enfermedad en los animales. Su estudio se articula estrechamente con la Biología Celular, disciplina que permite interpretar los cambios estructurales y funcionales que ocurren dentro de la célula frente a estímulos fisiológicos y patológicos. A la vez, se vincula profundamente con la Histología, que aporta el conocimiento del tejido normal necesario para reconocer alteraciones microscópicas, como lesiones degenerativas, inflamatorias o neoplásicas.
Esta integración de saberes es crucial para que el futuro profesional pueda identificar lesiones, interpretar hallazgos clínicos y de laboratorio, y comprender la evolución de las enfermedades. La Patología General, en diálogo permanente con la Biología Celular y la Histología, forma el fundamento científico que permitirá al médico veterinario tomar decisiones diagnósticas y terapéuticas con criterio sólido y responsable.